Por fin ha llegado el buen tiempo y el deseo de disfrutar de la terraza nos embarga. Aquí tienes una serie de consejos y trucos útiles y sencillos para mantenerla siempre en perfecto estado y prolongar la vida útil de tus muebles de exterior. - Barandilla: La barandilla de la terraza puede sufrir con el viento, la contaminación y la presencia de aves. Para dejarla impecable, empieza por quitar el polvo con un cepillo suave. Luego, límpiala con agua jabonosa para eliminar la suciedad adherida. Si la barandilla es de aluminio, evita utilizar estropajos para no dañarla. - Suelo: Si el suelo es de gres o terrazo y deseas eliminar manchas, prueba disolviendo en agua caliente un poco de jabón de Marsella, bicarbonato y vinagre blanco. Enjuaga bien y deja que seque; verás cómo reluce sin rastro de manchas. - Toldo: Los toldos son aliados contra el calor, pero también sufren los embates del exterior. Si tienes una vaporeta, úsala para reblandecer la suciedad; si no, emplea un cepillo de cerdas suaves humedecido con agua y jabón neutro. Aclara con un paño y deja secar. - Muebles: Aunque los muebles de exterior están diseñados para resistir, a veces el clima los afecta. Para protegerlos, guárdalos a la sombra cuando no los uses o mejor aún, cúbrelos con fundas para mayor protección. Si son de resina y aparecen manchas de moho, puedes eliminarlas con vinagre blanco caliente. El resto de la limpieza la puedes hacer con agua jabonosa. Si los muebles son de teca, evita mojarlos directamente con agua; mejor aspíralos y luego pásales un paño húmedo. En el caso de muebles de aluminio, al igual que con la barandilla, evita utilizar estropajos que puedan dañarlos. Un paño humedecido con detergente o jabón es suficiente. Si deseas proporcionar una protección adicional a los muebles de madera, puedes nutrirlos con aceite de teca una vez al año. Este tipo de aceite permite que la madera respire y la protege de los rayos del sol y ataques de hongos. Si notas que la madera está descolorida, dale brillo con un barniz que también la impermeabilizará. - Cojines y textiles: Los cojines y textiles de exterior pueden acumular polvo y suciedad con facilidad. Antes de usarlos nuevamente, sacúdelos bien para eliminar las partículas de polvo y, si es necesario, lávalos siguiendo las instrucciones del fabricante. Utiliza fundas desmontables para proteger los cojines de las inclemencias del tiempo y lavarlas con frecuencia. - Plantas y macetas: Si tienes plantas en tu terraza, asegúrate de cuidarlas adecuadamente durante el verano. Riega las plantas regularmente, pero evita el exceso de agua, ya que el suelo se seca más rápido con el calor. Además, protege las macetas del sol directo para evitar que las raíces se sobrecalienten. - Parasol: El parasol es otro elemento esencial en la terraza para resguardarnos del sol. Límpialo con un paño húmedo y asegúrate de que esté bien anclado al suelo o a la estructura. Si tienes la opción, inclina el parasol para evitar que se acumule agua de lluvia y se dañe. - Pérgolas y toldos retráctiles: Si cuentas con una pérgola o toldo retráctil, revisa su funcionamiento antes de usarlo y lubrica las partes móviles si es necesario. Asegúrate de que esté bien fijado y que pueda soportar las condiciones climáticas. - Mantenimiento regular: Realiza un mantenimiento regular de tu terraza, al menos una vez al mes, para detectar y solucionar cualquier problema a tiempo. Inspecciona los muebles, estructuras y accesorios para asegurarte de que todo esté en buen estado. Siguiendo estos consejos, tu terraza estará siempre lista para recibirte con comodidad y encanto durante toda la temporada de buen tiempo. Mantenerla en perfecto estado no solo prolongará la vida útil de tus muebles y elementos exteriores, sino que también te permitirá disfrutar al máximo de este espacio de relax y ocio en tu hogar.
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